El Cane Corso es una raza de perro grande, fuerte y poderosa que, a pesar de su imponente apariencia, necesita cuidados específicos para mantener su salud en óptimas condiciones. Como cualquier raza, los Cane Corso tienen predisposiciones genéticas a ciertas enfermedades que los dueños deben conocer para poder actuar de manera preventiva.
Enfermedades más comunes en el Cane Corso
- Displasia de cadera y codo:
Esta es una de las afecciones más comunes en razas grandes como el Cane Corso. Se trata de una malformación en la articulación de la cadera o el codo, que puede causar dolor y dificultades de movilidad. Es importante realizar revisiones periódicas con el veterinario para detectar esta afección a tiempo y evitar el desarrollo de artrosis. - Torsión gástrica:
Debido a su tamaño y estructura corporal, los Cane Corso son propensos a sufrir torsión gástrica, una condición en la que el estómago se retuerce, lo cual puede poner en riesgo la vida del perro. Para prevenirlo, es recomendable dividir las comidas en porciones más pequeñas y evitar el ejercicio físico intenso justo después de comer, también hay que evitar que beban agua muy rápido y mucha cantidad. No ponerles agua muy fría. - Problemas oculares:
Entre los problemas oculares que pueden desarrollar se encuentran el entropión y el ectropión, que afectan el párpado y pueden causar irritación. Es importante estar atentos a signos de enrojecimiento o molestias en los ojos del perro.
Cuidados específicos para la salud del Cane Corso
El Cane Corso requiere una dieta rica en proteínas de alta calidad y ácidos grasos omega-3 para mantener sus músculos fuertes y su piel y pelaje en buenas condiciones. Las dietas equilibradas basadas en carne cruda o alimentos formulados de alta gama son ideales para esta raza, aunque siempre es aconsejable consultar con un veterinario especializado en nutrición canina.
En cuanto al ejercicio, necesitan actividad física moderada, a partir de los 18 meses, para mantenerse en forma y evitar sobrepeso, que puede agravar problemas articulares.
Desparasitaciones y protección contra parásitos
Para garantizar la salud del Cane Corso, es fundamental mantener un programa de desparasitaciones tanto internas como externas durante todo el año. La desparasitación interna debe realizarse regularmente, siguiendo las indicaciones del veterinario, para proteger al perro de parásitos intestinales como lombrices y tenias.
En cuanto a la protección externa, se recomienda el uso de collares antiparasitarios o pipetas que protejan al perro contra pulgas, garrapatas y mosquitos que pueden transmitir enfermedades peligrosas, como la leishmaniasis. Este tipo de protección debe aplicarse durante todo el año, ya que estos parásitos pueden estar presentes incluso en los meses más fríos.
Prevención y cuidado continuo
Es fundamental realizar revisiones veterinarias periódicas para monitorear el estado de salud del Cane Corso y seguir un calendario de vacunación y desparasitación adecuado. Además, se debe prestar especial atención a la higiene bucal, ya que esta raza puede desarrollar sarro fácilmente, lo que puede llevar a problemas dentales y de encías.